Seguro de responsabilidad civil
Esta cobertura resulta realmente importante en el caso de los negocios, puesto que hace referencia a toda la responsabilidad que deriva de la actividad realizada en el mismo. De hecho, hay cierta normativa autonómica que sí que impone a algunos negocios contar con este seguro, si se tiene contacto con el público.
Puede ocurrir que, en el ejercicio de la actividad profesional, industrial o empresarial; se cause un perjuicio a un tercero, daños materiales, pérdidas económicas…Contratando un seguro de responsabilidad civil, si se produce un perjuicio a terceros por parte del responsable de la compañía en el ejercicio de su profesión, éste se encontrará protegido. En caso contrario, deberá responder con su patrimonio.
Las coberturas básicas suelen ser la responsabilidad civil de explotación; y los gastos de defensa y fianzas (incluye costes y gastos judiciales y extrajudiciales).
Seguro de accidentes
En el caso de contar con empleados en nuestro negocio, deberemos también contratar un seguro de accidentes. Este seguro se fija en muchos convenios colectivos, los cuales obligan a las empresas a contratarlos; y trata de proteger al asegurado con cierta cuantía en caso de fallecimiento o invalidez, que hayan sido causados por un accidente laboral.
Seguro de vehículos comerciales
Al contar con un vehículo comercial en tu negocio, es importante que el mismo se encuentre asegurado, al igual que hacemos en el caso de los seguros de automóvil. La principal diferencia es que, en este caso, el uso que se le va a dar a dicho vehículo tiene carácter comercial.
Existen multitud de variantes y de coberturas en el caso de los seguros para vehículos comerciales, siendo la primera de ellas la responsabilidad civil obligatoria. También podemos valorar un seguro de defensa jurídica, de accidentes del conductor, a terceros…
Seguros multirriesgo
En el caso de los seguros multirriesgo, éstos aseguran tanto el continente como el contenido. Además, se adaptan a las características de tu negocio: tipo de actividad, tamaño, y precio adaptado a las necesidades concretas del cliente. Las coberturas básicas de este tipo de seguros suelen ser daños eléctricos, incendio, explosión o caída de rayo.
Además, suele cubrir también riesgos como actos vandálicos, lluvias, viento, humo, inundación, asistencia, etc. Contratar un seguro multirriesgo es interesante por muchas razones. Principalmente, porque estaremos cubiertos frente a accidentes que provoquen daños materiales, frente a la violencia, ante pérdidas ocasionadas por mantener tu actividad paralizada en caso de accidente o siniestro, etc. Todo esto aporta al asegurado una tranquilidad extra en el desempeño de su profesión.